Revista Historia Cristiana, Número 96


El Hambre Gnóstica por el Conocimiento Oculto


EN EL SABER por David M. Scholer

Los Gnósticos creían que el conocimiento era la clave para la salvación--para unos pocos elegidos.

Increíble pero cierto: el Gnosticismo del siglo segundo es un tema "con un valor muy alto" el día de hoy. Se encuentra en discusión en programas de televisión, libros populares, novelas, y en un diluvio de literatura científica. El reciente descubrimiento del exhaustivo Evangelio Gnóstico de Judas causó gran sensación, principalmente porque Judas es el "héroe" de la historia. Diversos grupos y estudiosos han promocionado la sabiduría espiritual de los movimientos gnósticos y algunos incluso han sugerido que a algunos documentos Gnósticos injustamente les fueron impedidos entrar en el canon del Nuevo Testamento. La traducción más reciente, completa y fehaciente de los principales textos gnósticos antiguos, descubierta en 1945, se titula Las Escrituras de Nag Hammadi. Aun cuando los autores matizan el término "Escrituras", el título del libro hace un llamamiento a los líderes cristianos, que plantea muchas preguntas e inquietudes.

El alboroto corriente acerca del antiguo Gnosticismo cristiano ha conducido hacia muchas afirmaciones engañosas. Es de vital importancia para los cristianos entender los movimientos gnósticos tan exactamente como sea posible, tanto para el bien de captar la realidad de la iglesia del siglo segundo como para nuestra propia reflexión teológica. El gnosticismo apeló a las personas en ese momento porque se presentaron nuevas respuestas, a menudo creativas, a los grandes interrogantes de la existencia, apuntaladas por afirmaciones de una revelación secreta y especial. En el clima religioso de hoy en día, la literatura omitida que ofrece una alternativa a la tradición ortodoxa establecida tiene un atractivo irresistible. Estos textos antiguos también parecen hacer eco con algunas misiones espirituales del pueblo.


LOS SABERES

El "Gnosticismo" es un término moderno (utilizado por primera vez en 1669) para describir una base de movimientos en la iglesia antigua. Las personas que pertenecían a esas sectas creían que poseían conocimientos secretos; por lo tanto, el padre de la iglesia del siglo segundo Ireneo y los filósofos Neoplatonistas del siglo tercero los llamaron "gnósticos" (gnosis es la palabra griega para conocimiento). Los padres de la iglesia también se refieren a los gnósticos por los nombres de sus dirigentes. Cuando se describen a sí mismos, los gnósticos utilizan frases como "hijos de Set", "los elegidos", "los iluminados", "raza inamovible", y "el perfecto".

Debido al problema de cómo etiquetar a los gnósticos, algunos estudiosos modernos sostienen que el término Gnosticismo ya no debería utilizarse. Ellos señalan, correctamente, que el movimiento era diverso, con diferentes subgrupos haciendo hincapié en diferentes ideas. Pero otros historiadores sostienen que, en la medida en la que se reconoce esta diversidad, el gnosticismo sigue siendo un término genérico legítimo para hablar de las similitudes familiares entre estos diferentes grupos (justo como se utilizan los términos "cristianismo" o "evangélico").

Los orígenes del Gnosticismo están, como tantas otras cosas que queremos conocer acerca de la antigüedad, envueltos en misterio y son un tema de debate. La mayoría de los cristianos a lo largo de la historia--y muchos en la actualidad--han argumentado que los Gnósticos fueron una rama herética de la iglesia del segundo siglo. Todas las escrituras gnósticas que conocemos son del segundo y tercer siglo D.C. sin embargo, hay pruebas indirectas considerables acerca de que el movimiento data de una fecha previa al cristianismo (por ejemplo, una antigua tradición dice que Simón Mago, mencionado en Hechos 8, fue el "padre" del Gnosticismo). Esto puede tener su origen en Alejandría, Egipto, en el siglo primero D.C. como una forma aberrante del judaísmo, junto con algunas ideas acerca de la realidad divina trazada desde el platonismo de la época (que se había desarrollado más allá de las ideas filosóficas de Platón). Este movimiento posteriormente encontró su "hogar" en el cristianismo primitivo, entendiendo a Jesucristo como el revelador verdadero del Dios verdadero dentro de la cosmovisión gnóstica emergente.

La evidencia que tenemos sugiere que el Movimiento Gnóstico formó distintas, pero relacionadas, escuelas de pensamiento un poco antes del año 150 D.C. Anteriormente en el siglo XX, algunos estudiosos (especialmente Walter Bauer) argumentaron que en algunos lugares los cristianos Gnósticos eran mayoría. Ahora, sin embargo, parece evidente que los gnósticos constituían una minoría de los cristianos del segundo siglo, pero eran lo suficientemente fuertes como para causarles preocupación y alarma a varios de los padres de la iglesia.

Basilides y Valentino fueron dos líderes Gnósticos muy importantes del siglo segundo. Basilides fue profesor en Alejandría, Egipto, antes del año 150. Según los Padres de la iglesia, él había sido instruido por Menandro, quien a su vez había sido enseñado por Simón el Mago. Valentino, quien floreció en Alejandría y se fue a Roma alrededor del año 140, fue un brillante pensador gnóstico. Escribió extensamente y, según Tertuliano, durante un breve tiempo fue un candidato para el obispado de Roma. Algunos fragmentos de sus escritos han sobrevivido en citas breves de los padres de la iglesia. Además de las escuelas de pensamiento que se formaron en torno a estos dos grandes maestros, otros gnósticos, prestaron especial atención a la predicación del apóstol Tomás (el famoso Evangelio de Tomás refleja esta corriente de pensamiento) y a otros (llamados Setianos) centrados en Set como el "perfecto", hijo de Adán y Eva, y una figura gnóstica redentora (a veces subsumida bajo Cristo).


DIOS BUENO, DIOS MALO

Antes del descubrimiento de la colección de Nag Hammadi al rededor del año de 1940 (véase "El Secreto Es Develado"), prácticamente todo lo que sabíamos acerca del antiguo Gnosticismo provenía de los escritos anti gnósticos de los padres de la iglesia (que ocasionalmente citaban algunos textos gnósticos), un pagano Neoplatónico obró en contra de los gnósticos, y de un par de obras gnósticas posteriores, Los Dos Libros de Jeu y Pistis Sophia. Hoy en día, poseemos muchos más libros gnósticos que nos dan una imagen bastante fiable de cómo entienden el mundo y la salvación los gnósticos. Aunque existe una gran variedad entre las diferentes corrientes de pensamiento, hubo un número de creencias características.

Todas las culturas occidentales antiguas durante la época de la iglesia primitiva fueron dualistas hasta cierto grado, debido en parte a la influencia de Platón y de sus seguidores. Tal dualismo estaba tan extendido que el famoso erudito alemán Hans Jonas bromeó una vez diciendo que el Gnosis era el lazo común de todas las culturas religiosas de ese momento. El dualismo gnóstico se distingue por su carácter radical y absoluto: toda la materia (el mundo y el cuerpo) es mala y tiene su origen en un creador malvado, quien se desprendió y traicionó al Dios verdadero. Este inferior ser divino menor surgió a través de una trágica división misteriosa con el reino decisivo (el pleroma o "plenitud") del Dios absoluto, que a menudo es llamado el Padre de Todos.

Algunas formas de Gnosticismo creen que esta división en la deidad produjo una amplia gama de seres intermediarios (arcones, principados y poderes, muchos de los cuales reciben nombres como Yaldabaoth, Sakla[s], y Barbelo) que habitan el cosmos entre el pleroma y el reino terrenal.

Los gnósticos creían que la humanidad estaba atrapada en el mundo material/cuerpo humano. El creador pretende engañar a los seres humanos para mantenerlos ciegos a la realidad espiritual del último padre de todos. A fin de ofrecer la salvación, el último Dios envió un redentor, que hizo el viaje desde el pleroma mediante los seres intermediarios de la tierra. En algunos textos gnósticos este redentor es Set (aprovechando la presentación positiva de Génesis 4:25, 5:3 y 6:2-3), pero la mayoría de los textos gnósticos consideran a Cristo como el redentor. Debido a que el mundo material es malo, Cristo sólo parecía ser humano (esta creencia es llamada docetismo y es condenada en 1 Juan 4:2). Algunos libros Gnósticos como el Segundo Tratado del Gran Set, por lo tanto, niegan que Cristo muriera en la cruz.

Cristo brinda salvación al ofrecerle a sus verdaderos seguidores revelaciones/discursos secretos; este conocimiento es crucial. Los salvos son un grupo espiritual especial de la humanidad (la Neumática) quienes "conocen" la locura del mundo material/cuerpo y entienden que en una "resurrección espiritual" estarán unidos con el Padre de todos. Estos "elegidos" tienen una chispa divina (o espíritu) del último Dios dentro de ellos, la cual es rescatada por las revelaciones secretas dadas por el redentor. En muchos textos gnósticos, la salvación de la chispa verdadera es un ascenso de regreso al Pleroma a través de los seres intermediarios.


VOLTEAR LA BIBLIA AL REVÉS

Los gnósticos identificaron al malvado dios/creador con el Dios del Antiguo Testamento; esto tuvo profundas implicaciones para su comprensión de las Escrituras y de la historia de Israel. Todos los cristianos del siglo segundo estaban luchando con su identidad en relación con el judaísmo. Por ejemplo, Justino Mártir, escribiendo alrededor del año 150, declaró que la Escritura judía era realmente un libro cristiano, ya que los judíos no sabían cómo entenderla. Y en el año 165, Melitón, obispo de Sardis, predicó un sermón del Buen Viernes sobre la muerte de Cristo que acusaba a los judíos de haber matado a Dios.

Pero el enfoque gnóstico era mucho más denigrante para la herencia judía. De hecho, un pasaje clásico en el segundo tratado del Gran Set usa Isaías 45:5-6 para mostrar que el Dios de Israel es inferior; un verdadero Dios nunca habría tenido la necesidad de declarar que él era el único Dios. Este texto incluye también una fascinante letanía que afirma, en forma paralela, que "Adán fue una estafa", y continúa nombrando que Abraham, David, Salomón, los doce profetas, y Moisés ¡también fueron estafas! El punto culminante es la afirmación de que el Dios de la Biblia judía también es una estafa. Cada letanía termina con las palabras "no hemos pecado", refiriéndose a las afirmaciones gnósticas sobre un entendimiento espiritual adecuado. (Esta es una interesante declaración a la luz de 1 Juan 1:8-2:2, que establece claramente que aquellos que afirman que no han pecado están en un error).

Las interpretaciones gnósticas de las escrituras, por tanto, suelen convertir a los villanos en héroes y a los héroes en villanos. Por ejemplo, Eva y la serpiente en el jardín fueron quienes realmente estuvieron en contacto con el conocimiento del Dios absoluto; el creador inferior engañó a la humanidad. (De hecho, algunos grupos gnósticos eran conocidos como los Nasenos u Ofitas, de las palabras hebreas y griegas para "serpiente".) El erudito clásico del siglo XX, Arthur Darby Nock, una vez bromeando dijo que todo lo que se necesitaba para crear el gnosticismo era ¡voltear el génesis al revés y hacer una interpretación inversa!

En los textos gnósticos, los destinatarios de la "revelación" suelen ser varios seguidores de Jesús (por ejemplo, Tomás, Felipe, Pedro, Juan y María Magdalena). En el evangelio de Judas, el destinatario es Judas, lo cual resulta una sorpresa para los lectores de los evangelios canónicos. Aquí es Judas, quien entrega a Jesús de su cuerpo humano malvado, logrando así un importante objetivo gnóstico. Al igual que con Eva y la serpiente, una persona que parece ser "malvada" en los textos tradicionales es, en realidad, el único en contacto con la verdadera revelación gnóstica. En el evangelio de Judas, los demás discípulos de Jesús son mandados a servir al dios menor, mientras que Judas está abierto al Dios verdadero.


CUESTIONES FÍSICAS

Aparte del radical dualismo señalado anteriormente, el tema más común en los textos gnósticos es el ascetismo, o la negación de la importancia del cuerpo. Esta puede ser una razón por la que algunos monjes cristianos posteriores encontraron atractivos estos documentos. Sin embargo, varios padres de la iglesia (por ejemplo, san Ireneo en el siglo segundo y Epifanio en el siglo IV) describieron a los gnósticos como libertinos inmorales que burdamente se entregaban al cuerpo y sus pasiones. Los padres de la iglesia parecen caer en exageraciones polémicas, sin embargo, es posible que los ascetas se volvieran libertinos. (Diversos movimientos en la historia de la iglesia ciertamente demuestran esto--La Comunidad Oneida en la América del siglo XIX, por ejemplo).

Este rechazo gnóstico del cuerpo tuvo muchas consecuencias. Una de ellos fue su actitud hacia el martirio. Los cristianos del siglo segundo debatieron si las personas debían buscar el martirio o no, pero la mayoría celebró a sus mártires como héroes de la fe que habían compartido los sufrimientos y la muerte de Cristo. Los Gnósticos, por otro lado, parecen haber rechazado totalmente la idea de que tuviera valor morir por la fe de uno. El texto del Testimonio de la Verdad de Nag Hammadi, afirma: "Los necios tienen en sus mentes que, si simplemente hacen la confesión, 'Somos cristianos' de palabra, pero sin poder, e ignorantemente se entregan a una muerte humana, vivirán. Pero están en un error y no saben a dónde van o quien es Cristo realmente. En cambio, se están apresurando hacia los principados y las autoridades".


LA SITUACIÓN DE LA MUJER

Otra implicación del ascetismo y el rechazo del cuerpo de los gnósticos--y un tema moderno de mucho debate--es su visión sobre la mujer. Los textos gnósticos están repletos de imágenes sexuales, incluyendo términos femeninos e imágenes, sin embargo, afirman una y otra vez el objetivo de la renuncia sexual. El conocido Evangelio de Tomás dice, "Pues cada hembra que se convierte en varón, entrará en el Reino de los Cielos." Esto probablemente significa, en el contexto, que renunciar a la existencia física mundana, es lo que nos prepara para la verdadera salvación. Por lo tanto, los masculinos y femeninos Gnósticos son iguales espirituales.

Parece que las mujeres han tenido un lugar destacado en algunas corrientes del pensamiento gnóstico. María Magdalena, por ejemplo, es una persona de gran importancia en varios textos gnósticos, como el Evangelio de Tomás y el Evangelio de Felipe. El Evangelio de Felipe afirma que El Salvador amaba a María más que a todos los otros discípulos y, a menudo, la besaba. El Evangelio de María presenta a María como la destinataria de la revelación verdadera del Salvador, para gran disgusto de Pedro.

Probablemente estos textos indican cierto grado de protesta gnóstica contra la limitación de las funciones de la mujer en la iglesia mayoritaria, y pueden sugerir liderazgos femeninos, al menos en algunos círculos gnósticos. Sin embargo, muchos estudiosos son cautelosos; los textos que tenemos no muestran claramente que los movimientos Gnósticos fueran igualitarios o que estuvieran significativamente dominados por líderes femeninas.


¿"IGLESIAS" GNÓSTICAS?

Debido a su manera de ver el mundo físico, no está claro qué papel jugaron las prácticas rituales para los Gnósticos. ¿Formaron iglesias? ¿Celebraron los sacramentos? Tenemos muy poca evidencia. Pero parece bastante claro que muchos gnósticos abrazaron un conjunto de ritos sacramentales. Por ejemplo, el Evangelio Valentiniano de Felipe nombra cinco "misterios": bautismo, confirmación, eucaristía, redención y cámara nupcial. (Hay un gran debate entre los estudiosos acerca de si la cámara nupcial se refiere literalmente a la actividad sexual; más probable es simbólica, dado el rechazo del cuerpo gnóstico.) El Testimonio de la Verdad contrasta el falso bautismo (¿El de la mayoría de los líderes de la iglesia, quizás?) con el verdadero bautismo, que es la renuncia al mundo.

Los padres de la iglesia sugieren que los gnósticos tuvieron sus propias reuniones secretas. Una teoría es que los cristianos gnósticos pudieron haber asistido tanto a la iglesia mayoritaria, como a las reuniones secretas de las personas verdaderas (espirituales) (es decir, los gnósticos). El Apocalipsis de Pedro surge para atacar a los líderes de la Iglesia, diciendo que ellos conducen a la gente a desviarse: "Y hay otros entre aquellos que están fuera de nosotros, quienes se llaman a sí mismos obispos y diáconos, como si hubieran recibido la autoridad de parte de Dios, pero ellos se arrodillan ante el juicio de los líderes. Estas personas son canales secos".

Aunque ningún texto habla sobre la "evangelización" gnóstica, sus escritos pudieron haberse utilizado para atraer seguidores, y ciertamente los maestros gnósticos aprovechaban la oportunidad para hablar con otros cristianos acerca de sus "malos entendidos". A través de cualquier medio, el movimiento creció.


¿CUÁL ES EL ATRACTIVO?

Muchos aspectos del Gnosticismo nos parecen bastante extraños actualmente. Por ejemplo, en un texto Gnóstico, Jesús se ríe durante la crucifixión, debido a que la persona en la cruz es sólo un material creado por el dios menor. Sin embargo, a pesar de su "rareza", los primeros Padres de la iglesia lo consideraron una amenaza importante para la iglesia. ¿Cómo podía un movimiento de ese tipo haber atraído a algún seguidor de Cristo? ¿Qué hizo que las creencias gnósticas fueran tan atractivas?

Los gnósticos, al igual que todos los demás cristianos del siglo segundo, estaban intentando responder a las preguntas teológicas fundamentales que confrontan a la existencia humana: ¿Cuál es la relación entre Dios y el mundo creado? ¿Por qué existe el mal y cómo afecta la comprensión de Dios? ¿Cómo debe ser interpretado el Antiguo Testamento a la luz de Cristo? ¿Quién es Cristo, y qué es la salvación que Él nos ofrece? Dadas las realidades espirituales de la salvación, ¿Cómo debería estimar el cuerpo físico cualquier individuo? ¿Existe una resurrección de los muertos, y qué significa eso?

Los gnósticos estaban ofreciendo respuestas creativas a esas preguntas que muchos encuentran atractivas y convincentes. Para muchos en el mundo grecorromano, el dualismo gnóstico pudo haber parecido proporcionar soluciones muy ordenadas a cuestiones difíciles como la Encarnación. Una persona en esa cultura, sabía que algo era seguro: el Dios absoluto nunca sería revelado de una forma humana real. El gnosticismo a fin de cuentas fue un movimiento "espiritual".

Pero para la mayoría de los cristianos, las respuestas gnósticas sobre Dios, la creación, y Cristo eran teológicamente inadecuadas. Los grupos gnósticos se mantuvieron firmes a través de los siglos segundo y tercero, pero luego comenzaron a perder terreno significativamente y al rededor del quinto siglo estaban prácticamente extintos. Otras cuestiones como el Maniqueísmo (un movimiento derivado del Gnosticismo) se convirtió en el centro del debate, provocando las críticas de Agustín de Hipona, por ejemplo. Para ese entonces, la iglesia había ganado la posición y el poder para establecer y hacer cumplir las normas de la ortodoxia.


David M. Scholer es profesor del Nuevo Testamento en el Seminario Teológico Fuller en Pasadena, California.

 

EL GNOSTICISMO DESENMASCARADO

Por D. Jeffrey Bingham

La etiqueta "gnosticismo" es difusa, describe a diversas sectas e ideas del mundo antiguo. Este cuadro resume aquellos elementos al interior de los diversos grupos gnósticos que la mayoría de los cristianos encontraban especialmente problemáticos. Una secta gnóstica en particular podía no necesariamente poseer cada una de las siguientes creencias.


PUNTO DE VISTA GNÓSTICO

DIOS Hay dos Dioses opuestos: el padre supremo, espiritual y desconocido que está lejos del mundo y es revelado sólo por Cristo; y el subordinado, ignorante y malvado creador del mundo (Demiurgo).

MUNDO El mundo material creado por el Demiurgo es malo y aleja a los espirituales de la perfección. Éste debe perecer y se debe escapar de él.

HUMANIDAD Los Gnósticos son por naturaleza una elite, los únicos espirituales, porque tienen la "semilla" del reino espiritual dentro de ellos. Esta chispa divina (el espíritu) está atrapada dentro del cuerpo carnal material, y anhela la liberación de este calabozo malvado.

SALVACIÓN Sólo el espíritu inmortal de los Gnósticos es rescatado a medida que obtiene la liberación del cautiverio material y regresa al reino espiritual del Padre. La salvación es por el conocimiento (gnosis)—al conocer que el Dios verdadero es el Padre, no el Demiurgo, y que el verdadero hogar del espíritu es su lugar de origen, el reino del Padre, no el mundo material con sus cuerpos de carne.

CRISTO Cristo es un ser divino y espiritual del reino del Padre, que viene al mundo para revelar al Padre y la verdadera identidad de los espirituales, los gnósticos. Cristo no se encarnó o sufrió en la cruz. En cambio, él o simplemente pareció ser humano o habitó temporalmente en un ser humano llamado "Jesús".

CANON e HISTORIA Existen evangelios y testimonios adicionales de los apóstoles que transmiten la perfecta revelación de Cristo, además de (y en algunos casos superiores a) los cuatro evangelios de la iglesia. Esta revelación traída por Cristo manifiesta el verdadero conocimiento del Padre y de los gnósticos, mientras que la ley y los profetas manifiestan al Demiurgo.



VISIÓN ORTODOXA (expresada por Ireneo de Lyon)

DIOS Hay un solo Dios verdadero que es creador del mundo y Padre de Jesucristo.

MUNDO El mundo material fue creado por Dios y él vio que era bueno. Algún día este mundo será renovado y convertido en un hogar adecuado para los redimidos.

HUMANIDAD Dios creó a los seres humanos como una unidad de cuerpo y espíritu. No somos espirituales por naturaleza--eso es un regalo a disposición de todos por fe a través del ministerio del Espíritu Santo.

SALVACIÓN Tanto los aspectos materiales como los inmateriales de la creación de Dios son rescatados. Por la fe en Jesucristo, una persona recibe el Espíritu Santo, el cual proporciona vida espiritual, resucita su carne a la vida eterna, y redime al mundo creado.

CRISTO Jesucristo es el único Salvador, el Hijo eterno de Dios hecho carne, quien verdaderamente sufrió por los pecados de la humanidad y verdaderamente fue levantado inmortal y en carne incorruptible para su resurrección a la vida eterna.

CANON e HISTORIA La iglesia sólo reconoce cuatro evangelios, Mateo, Marcos, Lucas y Juan, y considera que estos cuatro, junto con el resto del Nuevo Testamento, están en armonía con la ley y los profetas. Todos dan testimonio del único Creador y Padre verdadero, de su Hijo Jesucristo, y del Espíritu Santo.

 

Последнее изменение: среда, 27 сентября 2017, 08:13