La Justificación por Fe 

por David Feddes


¡Santa Ana, ayúdame! ¡Quiero ser un monje!

         El
terror de un sacerdote

Ante estas palabras, estaba completamente aturdido y aterrorizado. Pensé para mis adentros, "...¿Quién soy yo, que debo levantar los ojos o levantar las manos hacia la divina Majestad? Los ángeles lo rodean. En su asentimiento, la tierra tiembla. ¿Y yo, un miserable pigmeo pequeño, diré 'Quiero esto, pido por eso'? Porque soy polvo y cenizas, estoy lleno de pecado, y le hablo al Dios vivo, eterno y verdadero".

Pecador atribulado

Mi situación era que, aunque era un monje impecable, me presenté ante Dios como un pecador preocupado por la conciencia, y no tenía confianza en que mi mérito pudiera apaciguarlo. Por lo tanto, no amaba a un Dios justo y furioso, sino que lo odiaba y murmuraba contra él.

La liberación de Lutero

Noche y día reflexioné hasta que vi la conexión entre la justicia de Dios y esa declaración de que "el justo por la fe vivirá". Entonces comprendí que la justicia de Dios es la justicia por la cual, por gracia y pura misericordia, Dios nos justifica a través de la fe. Me sentí renacer y haber pasado por puertas abiertas hacia el paraíso. Toda la Escritura adquirió un nuevo significado. Este pasaje se convirtió para mí en una puerta hacia el cielo.


 Dios justifica al impío

Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda; mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia. (Romanos 4:4-5).

• Justifica: da una posición recta

• Creer, no lograr

• Fe, no obras


 Abraham

¿Qué, pues, diremos que halló Abraham, nuestro padre según la carne?  2 Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué gloriarse, pero no para con Dios.  3 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia".



La fe contada por justicia

3 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia. Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda; mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia. (Romanos 4:4-5).

• Un salario es muy diferente de un regalo.


La fe contada como justicia

Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia. Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda; mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia. (Romanos 4:4-5).


Justifica al impío

Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia.  4 Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda;  5 mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia.


David

5 mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia. 6 Como también David habla de la bienaventuranza del hombre a quien Dios atribuye justicia sin obras, 7 diciendo: Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, Y cuyos pecados son cubiertos".



 Justifica al impío

Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús. (Romanos 3:23-26)



 Justificados por fe en Jesucristo.

Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo...   No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo... Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá." (Gálatas 2:16, 21; 3:11).


Conversión = arrepentimiento + fe
Toda mi persona recibiendo a todo el Cristo
                 
                        

 

Arrepentimiento

Fe

Mente      

Admitir que el pecado está mal.

Creer que el evangelio es verdadero.

Corazón   

Sentirse arrepentido y odiar el pecado.

Atesorar a Dios y Sus promesas.

Voluntad 

Elegir luchar contra el pecado y procurar cambiar.

Elegir confiar en Jesús como Salvador. Comprometerse a servirle como Señor.

 

Justificación y Santificación

• Justificación: una nueva posición legal de una vez por todas. En el instante en que creemos, Dios perdona todos nuestros pecados (pasados, presentes, futuros) porque Jesús pagó por ellos con su sangre, y Dios cuenta la perfecta obediencia de Jesús como nuestra. Dios nos acepta tal como somos y nos da una posición correcta basada en la obra terminada de Jesús.

• Santificación: un proceso permanente y de por vida. Nuestra relación con Dios se vuelve cercana, nuestro pecado tiene menos poder sobre nosotros, y nos volvemos más y más como Jesús. Dios cambia gradualmente lo que somos por la obra del Espíritu Santo.

Justificación      

• Instantánea

• De una vez por todas

• Imputada

• Condición legal

• Basada en la obra de Cristo fuera de nosotros

• Dios nos acepta como somos

Santificación

• De toda la vida

• Gradual

• Impartida

• Carácter moral

• Hace crecer la obra del Espíritu en nosotros

• Dios cambia lo que somos



Justificación y Santificación

• Justificación: una nueva posición legal de una vez por todas. En el instante en que creemos, Dios perdona todos nuestros pecados (pasados, presentes, futuros) porque Jesús pagó por ellos con su sangre, y Dios cuenta la perfecta obediencia de Jesús como nuestra. Dios nos acepta tal como somos y nos da una posición correcta basada en la obra terminada de Jesús.

• Santificación: un proceso permanente y de por vida. Nuestra relación con Dios se vuelve cercana, nuestro pecado tiene menos poder sobre nosotros, y nos volvemos más y más como Jesús. Dios cambia gradualmente lo que somos por la obra del Espíritu Santo.

Last modified: Monday, October 8, 2018, 11:12 AM